EL ONCE SE PONE UN '10'

Que un entrenador de Champions como Rudi Garcia, responsable técnico de uno de los equipos más potentes del calcio, defina al Barça como un equipo “imparable, imbatible e injugable” demuestra el momento que han alcanzado los de Luis Enrique en los últimos encuentros.

Desde la visita a Bielorrusia del pasado 20 de octubre, el balance del vigente campeón de Europa es de siete victorias y un solo empate, el que arrancó el meritorio Villanovense en la ida de dieciseisavos de final de la Copa del Rey.

9 partidos sin perder desde el parón de octubre, un empate y ocho victorias

Asimismo, el encuentro en Borisov fue el primero en que el Barça dejó su portería a cero después de dos meses de falta de solidez defensiva y críticas a la labor de Ter Stegen bajo palos. Desde entonces, el equipo sólo ha encajado dos goles (anecdóticos) en ocho partidos, ha explotado sus números en ataque y ha pasado de la sensación de estar sobreviviendo a la baja de Messi a vivir la máxima expresión individual y colectiva del curso con el rosarino reapareciendo más como un solista de lujo que como una necesidad imperiosa.

No en vano, el 10 entró en el Clásico con el partido más que resuelto. Su regreso -ante la Roma fue titular- ha sido una gran noticia para un conjunto que ha aprovechado dos meses sin su mejor jugador para ordenar otros asuntos.

EL CALDERÓN CANTÓ:"¡BENÍTEZ QUÉDATE, BENÍTEZ QUÉDATE!"

En el estadio del Atlético Madrid, cuando en el videomarcador se anunció que el Shakhtar marcaba el 3-4, en las gradas se empezó a escuchar un cántico dedicado al entrenador de el eterno rival de los colchoneros. 

Corría el minuto 89 de partido en el Vicente Calderón, con el 2-0 a favor del Atlético y sin más interés que ver si Torres era capaz de marcar su gol 100 (que no era poca cosa), cuando de pronto empezó un murmullo.

En el videomarcador se anunció el tercer gol del Shakhtar Donetsk, que significaba que el Madrid pasaba a ganar 3-4 cuando un rato antes ganaba 0-4. Un cántico salió del fondo y se propagó por el resto de la grada: "¡Benítez, quédate, Benítez quédate!", cantó con sorna la afición del Atlético, que el domingo vio cómo su equipo adelantaba a su vecino en la clasificación de la Liga.